sábado, 30 de junio de 2012

Formulario para la asistencia al Congreso Constituyente de Sociedad Civil y Democracia.

 
                           
 
 
 
 
 
 
CONGRESO CONSTITUYENTE
Madrid. Palacio de Congresos
Paseo de la Castellana 99
6 de Octubre
9.30 h. A 14 h
 
 
 
 
INSCRIPCIÓN
 
Nombre:
Apellidos:
D.N.I. nº:
Domicilio:
Correo electrónico:
 
Abono de la cuota de inscripción: 5 €uros ( marcar el que corresponda)
Mediante trasferencia a la cuenta corriente 2100 2105 62 02 00324374
Entrega en mano en el momento de la acreditación
 
 
Datos adicionales que desee incorporar:
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
SOCIEDAD CIVIL Y DEMOCRACIA. SCD. Gamazo 8. 47004 Valladolid
Teléfonos de contacto: 983.301111/
Correo electrónico: congreso@sociedadcivilydemocracia.es

jueves, 28 de junio de 2012

Tiki-taka … o la excelencia a través de la paciencia y la constancia. Por Eduardo Brunet Alvarez de Sotomayor


En nuestro correo de Sociedad Civil y Democracia, hemos recibido este art, lo cual agradecemos a su autor, asi como las palabras de ánimo.

"mucho animo y buena suerte con ese proyecto de nuevo partido politico/plataforma ciudadana, la verdad es que hace falta como agua de mayo.

os acompaño en esa linea un articulo que escribi recientemente por si os es de interes.

un abrazo"


Tiki-taka … o la excelencia a través de la paciencia y la constancia.

Por qué gana la selección española de fútbol?  porque sus jugadores individualmente considerados son los mejores del mundo en cada una de sus posiciones? Porque desarrollan una estrategia posicional realmente innovadora frente al resto que les da una ventaja competitiva? Porque son los más listos que saben rentabilizar individualmente con el mínimo esfuerzo los errores de los demás?. .. o quizás será porque han hecho del trabajo en equipo, la paciencia, la constancia y la fe en sus posibilidades  su seña de identidad?
Si hubiésemos tenido, tuviésemos o tuviéramos dirigentes y  profesionales como del Bosque  y menos prima-donas, perdonavidas, lisonjeros e irresponsables vendedores de  “bálsamos de fierabrás” .. quizás, como la selección, nos hubiéramos enfocado hacia modelos de comportamiento socio-económico que en lugar de ensalzar el “pelotazo” como medida del éxito personal, hubiera reconocido la virtud del trabajo bien hecho, el esfuerzo, el honor, la constancia y la responsabilidad personal y colectiva … entonces,  otro gallo nos cantaría!!
Son muchos los culpables de estos lodos: los medios de comunicación en el ensalzamiento de “famos@s” con cabeza hueca, pies de barro y tetas de silicona;  una clase política mediocre, irresponsable y ensimismada;  unos dirigentes empresariales cómplices y cortoplacistas; y desde luego, una sociedad civil que hemos asistido hipnotizados por una televisión basura,  sobornados con crédito fácil y desarmados por la pérdida de referentes morales, a este auténtico derrumbe  del Ser Nacional.
Y esto, no es fruto de los últimos ocho años … esto, se empezó a fraguar en la tan ensalzada Transición y más concretamente, a partir del nuevo paradigma de quiebra democrática y abuso sistemático que trajo la primera mayoría absoluta de Felipe González. Ningún político desde entonces, ha sido capaz de renunciar a esas desmedidas parcelas de poder, torticeros trasvases entre los tres poderes y cuasi impunidad que favorece el sistema electoral astutamente perpetrado.. todo ello aderezado, engrasado y sostenido por un clientelismo caciquil (fábrica de subvenciones millonarias) y culto a la personalidad (fábrica de hombres-des-hechos-a-si-mismos) auténtica gangrena totalitarista que desde la Expo de Sevilla ha ido subiendo por el cuerpo del Estado hasta llegar incluso al último reducto Asturiano, como hemos visto con gran fuego de artificio recientemente.
No, no es la economía, son los valores lo que nos tenemos que hacer mirar o más concretamente la esencia del Ser Español.
Los Franceses tienen su grandeza, los Ingleses su flema, los alemanes su constancia, los Italianos su aparente caos …, pero y nosotros ..? es que el Estado de las Autonomías ha dejado algo? Divide y vencerás .. esa debió de ser la clara estrategia de los sagaces Transicionantes que para acabar con Una Grande y Libre (que tampoco lo era.. no se ponga nervioso  el personal..)  la convirtieron en varias, pequeñas, inviables y enfrentadas.


Pero lo que más  avergüenza es que ya Ortega y Gasset y otros muchos y olvidados  prohombres habían puesto el dedo en la llaga y tratado de danos las claves para volver a vertebrarnos y regenerarnos como Nación con un sentido de destino y un estilo propio … hasta cuándo vamos a postergar el doloroso ejercicio de introspección que nos libere de nuestros fantasmas y complejos y nos permita volver a encontrar nuestra senda en la Historia?
Es que no podemos ambicionar como Nación reposicionarnos al mismo nivel que la selección española de futbol?
Hay algún condicionante genético o  biológico que impida que el Andaluz vuelva a ser reconocido por su laboriosidad, el Catalán por su generosidad, el Castellano por su locuacidad, el Gallego por su claridad, el Extremeño por su espíritu emprendedor, el Vasco por su humildad… no se ofenda nadie, aquí el orden de los factores solo enriquece el producto!
Por qué no podemos todos juntos de nuevo .. o por primera vez que más dará, construir una España, la mejor España, esa España que queramos hereden nuestros hijos y nietos  y de la que nos sintamos legítimamente orgullosos?
Por qué creemos que no podemos ganar este partido?  O peor, por qué ni siquiera nos planteamos jugarlo?
Seamos actores de nuestro futuro y no rehenes de nuestra historia!!!
Tiki-taka.. poco a poco, con “seny”, con humor, con fé, con valentía, con humildad, con coraje, con determinación, con constancia, con lo mejor de todos nosotros … asi, sí seremos campeones de nuevo y no solo en Europa, sino en el Mundo entero!
Nadie puede venir e “intervenir” nuestra  alma, nuestro verdadero ser.. esa llave solo está en nuestra mano .. ahora te toca a ti jugar…  toca y pásala !! 

miércoles, 27 de junio de 2012

La hora de la verdad. Por Daniel Movilla





Allá por el año 1994 constituimos en Valladolid, entre varios amigos, una Asociación que bajo el nombre de 'Alternativa Social', quería dar voz a los ciudadanos de nuestra ciudad para tratar de contrarrestar, modestamente, el poder omnímodo de los partidos políticos. No teníamos dinero, ni capacidad de convocatoria, ni organización suficiente. Solo ilusión. Todo eso es verdad. Pero también es verdad que nos encontramos entonces con una sociedad, la del año 1994, silente, resignada y dispuesta a contemplar, sin mover un solo músculo, un día tras otro, cómo  los partidos políticos, bajo el manto democrático y legitimador de las urnas, hacían y deshacían a su antojo.

La necesidad de sacar adelante a mi familia, tras la intervención de Banesto, y una oportuna inspección de Hacienda que duró más de dos años, hizo que nuestro proyecto alternativo quedase en el olvido. 

Hoy, dieciocho años mas tarde, lo intentamos de nuevo. Hemos recorrido mucho camino. Tenemos ya, como decía Ortega, el sol a la espalda. Pero también tenemos, otra vez, y esto lo digo yo, el corazón lleno de ilusión y de fuerza. Creemos que en este momento, la sociedad española está verdaderamente dispuesta a liderar un cambio en el sistema democrático. 

Creemos que ya es hora de decirle a la clase política, que no puede tener en exclusiva el monopolio de la representación parlamentaria. Que la sociedad española tiene múltiples instituciones, organizaciones y plataformas ciudadanas independientes, que pueden y deben de tener voz en el Congreso de los Diputados. 

Creemos que transcurridos ya más de treinta años desde que la Constitución Española fue aprobada, es la hora de hacerla cumplir a rajatabla y, ¿por qué no?, revisarla en muchos de sus artículos, que son manifiestamente mejorables.

Y creemos, finalmente, que nos hemos equivocado al configurar la estructura del Estado. En un momento tan crucial para este país, cuando nos estamos jugando el endeudamiento de futuras generaciones de españoles, no es posible que no miremos a las Comunidades Autónomas y nos preguntemos el porqué de su estructura. Lo que fue bueno en su momento, no lo hace bueno para siempre. 

España necesita repensar de nuevo su estructura, su camino y hacerlo con frialdad, no con el estómago.

Los españoles siempre hemos sido un pueblo valiente, capaz de enfrentarse a sus miedos y superarlos. Haber olvidado esto, nos ha llevado a permitir tanto descaro político como el que nos toca vivir.

Hoy nace formalmente 'Sociedad Civil y Democracia', una plataforma ciudadana que quiere participar democráticamente en las elecciones de nuestro país. Somos ciudadanos de a pie, convencidos de que si queremos cambiar el modelo, tenemos que hacerlo desde dentro. No hay otra forma. Debemos entrar en el sistema, para intentar cambiar el sistema. Será difícil, será peligroso, pero es la única forma de comprobar si la sociedad española quiere de verdad, un cambio profundo en nuestra democracia. 

'Sociedad Civil y Democracia' como movimiento social inicia un camino lleno de incertidumbres, convencidos de que los partidos políticos, anclados firmemente en el sistema, harán lo imposible para evitar nuestra presencia en la contienda electoral. Pero no tenemos otra opción más que intentarlo. Es la hora de la verdad.

Daniel Movilla

Twitter: @danielmovilla


http://cyleon.diariocritico.com/opinion/daniel-movilla/294629

martes, 26 de junio de 2012

Nace el partido político de la Sociedad Civil

“Sociedad Civil y Democracia celebrará su congreso constituyente el próximo mes de octubre”
 
La Asociación "Sociedad Civil Española", crea un nuevo partido político “Sociedad Civil y Democracia (SCD), cuyo congreso constituyente tendrá lugar en octubre de este año, en Madrid.
 
Sociedad Civil Española, asociación estrechamente vinculada a los movimientos ciudadanos durante los últimos años, ha puesto en marcha los mecanismos de constitución de un nuevo partido político, "Sociedad Civil y Democracia" (SCD), con el que comparecerá en próximas contiendas electorales, tanto autonómicas como nacionales y europeas.
 
El punto de partida del proyecto tuvo lugar el pasado mes de mayo,  momento en el que Sociedad Civil Española abrió distintas delegaciones virtuales, con el fin de promover la afiliación de amigos y simpatizantes a través de las redes sociales de Twitter y Facebook.
 
Sociedad Civil y Democracia, que ya está inscrito en el Registro del Ministerio del Interior, celebrará su congreso constituyente el próximo mes de octubre, salvo que acontecimientos inesperados precipiten su presentación.
 
Hasta esa fecha, y continuando con la actividad que ha realizado en estos últimos meses, Sociedad Civil Española seguirá manteniendo encuentros con empresarios, universitarios, colectivos sociales y plataformas ciudadanas, así como con personalidades de relevancia social, con el fin de transmitirles la necesidad de que la sociedad civil tome mas protagonismo en la vida pública.
 
Además, en septiembre tiene previsto protagonizar distintos encuentros en Cantabria, Asturias, Galicia, Castilla y León, Valencia, Andalucía y Madrid, que son las comunidades autónomas en las que desea contar con estructura e implantación al comienzo de la andadura de este nuevo partido político.

domingo, 24 de junio de 2012

Sociedad civil y poder político. Por Mario Conde


FotoCualquier proyecto político, para convertirse en proyecto colectivo, requiere la participación de la sociedad civil.
“Sociedad civil y poder político” fue el título del discurso que el 9 de junio de 1993 pronuncié en el 500 aniversario de la Universidad Complutense con presencia de S. M. el Rey, quien, como es protocolario, con anterioridad conoció y permitió su dictado. Allí sostuve, y cito literalmente, que “el desarrollo de la sociedad civil requiere que cualquier proyecto político, para convertirse en proyecto colectivo, requiera la participación de la sociedad civil”. Para ello –añadía– “es necesario buscar fórmulas imaginativas para conseguir la presencia de la sociedad civil en algunas instancias del Estado”. Y esta reclamación la formulaba debido a tres constataciones básicas: la primera, “se advierte entre los ciudadanos un descenso generalizado de valoración de la clase política. Podría decirse que existe una desconfianza entre el ciudadano y la clase política”. La segunda, que esta situación afecta “a los partidos políticos como cauce exclusivo para la generación de la clase gobernante”. La tercera, que todo ello conducía a una “cierta invasión del Poder Ejecutivo sobre el Legislativo y el Judicial, con una tendencia muy problemática de confusión entre Gobierno y Estado”.
En el recinto se encontraban todas las personas capaces de implantar en nuestro país un modelo de sociedad civil como el que supuestamente aceptaban con su aplauso al concluir la lectura. La realidad, sin embargo, evidencia que la conducta seguida fue bien distinta. En primer término, implantaron la idea de que mi pretensión era política, entendiendo por tal electoral, sin querer valorar que acababa de firmar un contrato con el –entonces– primer banco del mundo, JP Morgan, que me ligaba a Banesto por más de cinco años. Pero el temor al cambio real en el Sistema los llevó a convertirse en propagandistas de una falsa idea, que acabó cimentando la decisión de los dos líderes políticos del PP y PSOE de intervenir Banesto como medio de fagocitar espuriamente una imaginaria carrera política que sólo existió en sus mentes temerosas de perder un marco de poder tejido con una red de intereses mutuos.
Han transcurrido casi 20 años.
La sociedad civil española al día de hoy se encuentra más desarbolada, indefensa, desorientada y frustrada que cuando pronuncié esas palabras. A las evidencias me remito. El control que hoy los medios técnicos permiten al poder sobre las personas, los grupos y las organizaciones sociales carece de precedentes. Es cierto que algunos utilizan estas dos palabras –sociedad civil– en discursos, premios y festejos de variado tipo, pero no debemos engañarnos: generalmente forman parte del entramado de poder que se empeñó en cortocircuitar cualquier movimiento de independencia creativa de esa sociedad civil a la que hoy dicen defender. Mientras tanto, la clase política se armó de privilegios, los partidos se reafirmaron como cauce exclusivo de participación y la división de poderes alcanzó el limbo de los sueños ni siquiera soñados. Y por todo ello la clase política, los partidos políticos y hasta el sistema de representación parlamentaria se incluyen un día sí y otro aún más, entre los principales problemas de los españoles.
El Sistema no va a propiciar el cambio. Después de 20 años y de varias mayorías absolutas alternativas entre los dos partidos dominantes ni un ápice se ha movido en la dirección reclamada. Al contrario. No traslado ejemplos, pero dispongo de un almacén repleto a disposición de quien los reclame. No entienden o no quieren entender. El sistema de poder se ha reforzado con la sumisión de medios de comunicación social provocada por la concentración de poder financiero y publicitario, que dificulta en extremo la práctica de una real independencia.
Creamos asociaciones, fundaciones, movimientos, publicamos artículos, dictamos conferencias, percibimos la realidad en la que viven empresarios, médicos, profesionales, catedráticos, profesores universitarios... No sirve de casi nada, al menos no en lo que se refiere a conseguir un cambio real de actitudes de quienes conforman y viven de y por el Sistema. Una sensación de esterilidad de tales comportamientos invade a la sociedad. No controlamos nuestro destino, ignoramos por qué ocurre lo que sucede, sabemos que sus decisiones afectan a nuestras vidas pero carecemos de instrumentos capaces de convertir las protestas en propuestas serias e inteligentes capaces de traducirse en cambios reales que modifiquen nuestro modelo de convivencia. Y la mayoría somos gente sensata, prudente, sin violencias, que nos ganamos la vida con nuestro trabajo, pero no por ello dejamos de decir: queremos administrar lo nuestro, ser cuando menos algo dueños de nuestro destino.
Necesitamos conseguir que los partidos no sean el cauce exclusivo de participación de la sociedad civil en la res publica, en lo que es de todos, y que la clase política se renueve dejando de ser un colectivo endogámico alejado de los ciudadanos que son los verdaderos dueños de esa empresa llamada España. Para ello se necesitan leyes que deroguen privilegios y que instauren verdaderas libertades. Leyes con las que organizar la convivencia de un proyecto de Nación. Pero no sólo normas jurídicas: necesitamos cambio de personas. No conseguiremos independencia del Poder Judicial si a pesar de los cambios normativos continúan en sus puestos de mando quienes han contribuido a deteriorar la sagrada independencia de la Justicia. ¿Como diseñar un modelo empresarial de España exclusivamente por quienes jamás han sabido lo que es una nómina, los que nunca han creado riqueza, los que han dedicado su vida a escalar puestos en la organización de un partido convertido en una especie de segunda Administración Pública financiada con cargo a los presupuestos del Estado? Hemos ofrecido nuestra colaboración como sociedad civil. Verbalmente y por escrito. La respuesta ha sido el silencio o la indiferencia. Seguiremos insistiendo en colaborar porque nos importa España.
Pero es la hora de pasar del discurso a la realidad. Algunos dirán que nuestra sociedad no está preparada, que es silente, que protesta pero no actúa, que se calla, que soporta lo que le echen, que se acoge al mal menor. Pues es posible, pero no es seguro. La única manera de comprobarlo es preguntarle si quiere de verdad que esto cambie. Si reclama un conjunto de leyes que le devuelva sus derechos, su protagonismo, que instale libertades reales y no formales, que abran la vida política a ciudadanos que puedan estar en el Parlamento y seguir viviendo en la vida privada, cada uno en sus profesiones, sin que la política sea un medio de vida exclusivo financiado con cargo a la riqueza creada por otros. No sé si querrá pero hay que verlo. Y tengamos clara una cosa: para conseguir cambios de leyes hay que estar en el Parlamento. Y eso tiene nombre en nuestro modelo. Así que ese es el reto: pasar de la palabra a la acción por el único camino que permite el Sistema actual. Respetamos el modelo, pero deseamos mejorarlo en profundidad, sabiendo que los cambios de un sistema de poder sólo pueden hacerse desde dentro. Es la sociedad civil la que tiene ahora que decidir si quiere o no ser dueña de su destino.

viernes, 22 de junio de 2012

La sentencia de Sortu, el Gobierno y el llamado dolo eventual. Por Mario Conde

Ayer comentaba con un jurista la sentencia de Sortu, esto es, su legalización por el Tribunal Constitucional. Admito que no la he estudiado directamente y por eso me apoyo en sus ideas, conocedor, como es, de la materia. Antes que nada me centré en el argumento -por así decir- utilizado por algunos consistente en que la legalización de Sortu derivaba como consecuencia ineludible de la legalización de Bildu, decisión igualmente adoptada por el Tribunal Constitucional tiempo atrás y que ha provocado el resultado de que los representantes de una linea partidista que se dice con conexiones evidentes con la banda terrorista ETA se sienten en y controlen algunas instituciones capitales del país vasco.

No son, me dijo, y comparto el criterio, asuntos que se liguen de modo inevitable, porque los puntos de partida son diferentes. Bildu se presentó en su día como una coalición de partidos, algunos de los cuales nada tienen que ver, al menos nada en un análisis puramente jurídico, con el mundo etarra, al margen de las posibles preferencias o ideas de algunos miembros. Como organizaciones, en tanto tales, no se encuentran ligadas al terrorismo. Precisamente por ello no era fácil su ilegalización. Insisto, en el plano de lo jurídico, porque habría que demostrar una contaminación total de la coalición por aquellas personas físicas provenientes de partidos ilegalizados, precisamente por su deriva de organizaciones partidistas calificadas de terminales del terrorismo etarra. Aún así, el Supremo consideró probado el enlace y fue el Tribunal Constitucional el que desmoronó la sentencia.

En el caso de Sortu la cosa es, según me dice, bien diferente. Y simple: Sortu es heredera directa de Herri Batasuna y esta ha sido calificada de organización terrorista, en España y fuera de España. Es así de simple y directo: Batasuna se considera jurídica y políticamente una terminal de ETA. Sortu es la heredera de Batasuna. Por tanto, la legalización de Sortu es, en esta caracterización, una legalización de Batasuna y consiguientemente una concesión jurídico-política al terrorismo etarra.

Ya se ve que con este análisis nos encontramos ante dos realidades muy diferentes. No me refiero solo en el plano de lo político, en donde la diferencia siendo muy importante no deja de tener perfiles en ciertos puntos bastante borrosos, sino en lo jurídico. Dicho de otra manera: la legalización de Sortu es mucho mas inconcebible en lo jurídico que la de  Bildu.

Para mi, además, existe un dato adicional de envergadura moral y jurídica. Para ser legal hay que rechazar la violencia. Bien, pero toda la violencia. No solo la violencia de ahora en adelante. Si se tratara de un partido cuyos efectivos personales y cuya trayectoria apareciera ex novo no cabria hablar de pasado. Pero en el caso de Sortu, ¿acaso no existe ese pasado?. Claro que existe. Y tiene desagraciadamente nombre y apellidos de muchas víctimas asesinadas. Por ello mismo no entiendo un rechazo en el sentido siguiente: “de ahora en adelante rechazo la violencia y no volveré a matar ni a utilizarla contra las personas o los bienes”. No. No es asunto de ahora en adelante sino de un rechazo integral, de hoy, de ayer y de mañana. ¿Repudia usted los asesinatos de la banda terrorista cometida estos años pasados?. La respuesta es simple: si o no. No caben medias tintas. Pues no responden abiertamente. Dicen cosas como que no hay que mirar atrás, que lo que cuenta es el futuro, que conviene estabilizar el conflicto vasco en un sendero de solución…Palabras que solo pretenden evitar esa simple respuesta.

Moralmente me parece inaceptable que no sean rotundos en el rechazo. Pero hay algo mas: ¿es jurídicamente valuable?  Pues creo que sí porque un Tribunal tiene que tomar en consideración, no solo los estatutos de un partido, sino las palabras, los hechos y las conductas de quienes los integran y dirigen, y ello con el objetivo de comprobar jurídicamente si su rechazo formal y estatutario a la violencia se encuentra suficientemente acreditado en lo jurídico. ¿Puede considerarse creíble un rechazo formal cuando se niegan a condenar la muerte de casi mil inocentes? Insisto: ahora lo trato en términos jurídicos no solo morales. MI respuesta es clara: no. No me creo ese rechazo, ni resulta jurídicamente suficiente, mientras no se produzca esa condena.

No me digan que eso es ignorar el problema vasco, que es poner piedras en el sendero de la paz, que la sociedad vasca dice que le parece muy bien legalizar a a Sortu…Esas consideraciones son ajenas a lo que trato ahora. Creo, además, que políticamente es equivocado el sendero, pero, insisto, ahora valoro lo jurídico.

¿Que sucederá? Pues como siempre ocurre un decisión de este tipo abre una puerta a un camino que va a ser recorrido indefectiblemente. ¿Lo ignoraba el Gobierno? ¿Podría haber hecho algo?. Casualmente cuando llegamos a este punto ese jurista fino me puso un ejemplo traído del mundo de las categorías penales. Me habló del dolo eventual. En efecto: en materia penal existe el dolo directo que el es propio de quien quiere el resultado final, lo asume y pone los medios para conseguirlo. Pegarle un tiro a una persona de modo deliberado y consciente, por ejemplo. Pero existe otra categoría a la que los juristas llaman el dolo eventual. Se caracteriza por lo siguiente: a) el sujeto visualiza el resultado b) no lo quiere directamente y c) pero no hace nada para evitarlo sabiendo que se va a producir.

¿Pudo haber evitado el Gobierno la sentencia de Bildu?. Siendo como es una instancia política, creo que tendremos pocas dudas y no hace falta ser obsceno en explicarlo. Podría decirse que en términos políticos el Gobierno ha actuado con dolo eventual: sabia que la sentencia se iba a producir, no la ha querido -es posible- pero no la ha evitado.  No lo digo en términos jurídicos sino políticos. Algunos me dirán que no sea ingenuo, que hay dolo directo, que el Gobierno quería este resultado porque forma parte de su hoja de ruta. Es posible pero al menos cabe pensar en ese dolo eventual. No se puede exigir responsabilidades penales, es obvio, pero no se puede dejar de pensar en que es verdad que el Gobierno supo que la sentencia se iba a producir, pudo evitarla, no hizo nada para ello, aunque no le gustara el resultado. Eso, como mínimo.

Y queda la reflexión final: es obvio que los dos partidos juntos pudieron evitar ese resultado. Sobre esto no hay duda alguna. Así que la Sentencia de Sortu es un dolo eventual del gobierno, pero es dolo directo del Sistema. Y ya termino con esta reflexión: ¿en cuantos otros asuntos que nos afectan a diario el Gobierno y/o el Sistema está actuando, como mínimo,  con dolo eventual?. Seguiremos

http://www.fundacioncivil.org/2012/06/la-sentencia-de-sortu-el-gobierno-y-el-llamado-dolo-eventual/

martes, 19 de junio de 2012

¿Qué vamos a concentrar en un Gobierno de concentración? Por Montserrat Nebreda.


Mientras en el PP van llamando “antipatriota” a Almunia por decir verdades como puños, que mejor dejar caer un banco si salvarlo nos va a costar lo que no vale y que de esos tenemos en España unos cuantos, su jefe, incapaz de cultivar la necesaria unidad entre los españoles, dice que apuesta por la de Europa, esa entelequia que permite al FMI, vía Lagarde, decirnos en el morro que si no se soluciona la crisis del euro en tres meses, mejor lo dejamos correr. La verdad lo es aunque Agamenón (véase Almunia, véase Lagarde, véase el porquero) no esté haciendo el menor favor a la confianza de los inversores, a la estabilidad de los mercados, y demás frases encubridoras del tongo máximo en que estamos metidos. Pero a río revuelto, ganancia de pescadores, y ahí salen enseguida los partidarios del “gobierno de concentración nacional” que entienden posible una solución si los principales partidos y algunos independientes se suman en un nuevo gobierno que, de espaldas a lo decidido en las urnas, se instale en el poder.
Pero ¿de qué poder estamos hablando? Teniendo en cuenta la nula oposición que está haciendo el PSOE, y la fácil y huera de los partidos-mini, la mayoría absoluta con que cuenta el PP ¿a qué se enfrenta? Se enfrenta a su propio vasallaje a quien manda en la Unión Europea y a su Banco, a uno mayor a ese FMI del que Rodrigo Rato salió corriendo y algunos empiezan a criticar su estancia en él, y a todos esos G (el 7, el 20, ahora el 20+1…) tan democráticamente elegidos, por cierto. Así que sólo le queda al poder político en España abdicar de su responsabilidad y simular que se ponen a gobernar los de izquierdas, los de derechas y algunos independientes, de tal modo que, si como se augura, las cosas no salen bien, la responsabilidad es de… ¡todos! Y todos, por supuesto, en el momento de la debacle seremos antes que nadie los que no decidimos (o mejor dicho, sí lo hicimos en las últimas elecciones generales, ya se ve que para nada), pero pagamos la fiesta.
Si no hay poder ¿qué concentramos?
Y si como parece los gobernantes no tienen el poder o padecen yugos que aceptan mansamente, si además respiramos al ver que Grecia se aleja de levantarse contra ese yugo, ¿me sabrían ustedes decir qué íbamos a concentrar en ese supuesto gobierno pluricolor con independientes? ¿No era De Guindos un independiente?, ¿no dice él lo mismo que todos esos que jamás se arriesgaron a dar un paso en política y que desde la bambalina dan consejos económicos que no sabemos si son de interés general o de interés privado? ¿Es que alguien cree que hay diferencia entre aquel mayo de 2010 de Zapatero y el escaso y declinante tiempo de Gobierno de Rajoy? Sólo ha cambiado el tipo de interés de nuestros bonos, y el hecho de que se ha más que doblado nuestra prima de riesgo, pero por lo demás, ya no sabemos si subir el IVA o los impuestos es de izquierdas o de derechas, si la austeridad es comunista o fascista, si los programas keynesianos incluyen el plan E, o los AVES que hemos esparcido por España, si limitar al poder judicial es progre o conservador, si recentralizar el Estado es algo que acometería un liberal o un jacobino…. Pueden decir una cosa y su contraria casi de forma contemporánea, porque el tiempo de la política es el del XIX y el de la información pivota ya sobre el vértigo del XXI.
Salvaré contadas excepciones para que no me llamen demagoga, pero en cuanto al resto de los protagonistas de la política actual, en un bando y en otros son los mismos, y dan lo mismo, no cambian más que el color de la bandera que les dan a la entrada de sus mítines, militan en el sentido de quedarse en el poder el mayor tiempo posible, no fueron jamás patriotas de nada más que de su bolsillo, su trinchera y su bando, creen en Europa sólo porque todavía no nos toca ser paganos, y porque la expulsión del euro es un ridículo espantoso que ningún gobernante español se puede permitir.  ¿Para qué los queremos, pues concentrados? ¿Para que nos sea imposible identificar a los culpables? Pues a mí no me interesa, quiero que cada uno de ellos, pasando por el poder, reconozca que le sobrepasa, que no está preparado para ejercerlo, que llegó allí por casualidad o evitando trabajar como hacemos los demás, colocándose aquí y allá donde menos se veía que no pegaba un sello, hasta que, azares del destino, se vio colocado al frente del navío y todos pudimos ver que no era capitán.
No hay capitanes válidos entre quienes ahora mismo tienen el poder.
No hay capitanes válidos entre quienes ahora mismo tienen, por delegación de una masa desinformada, manipulada e indolente, el poder. Sus carencias son las nuestras. Decidimos que todos podíamos votar y nos hemos creído que con eso, cinco minutos cada cierto tiempo eligiendo entre susto y muerte, se construía la democracia, y ahora, en nuestras narices nos dicen que no, que mejor hacen un gobierno de concentración, que salvaguarde sus cabezas en el tiempo de escabechina que se avista. El PP se resiste, y es comprensible, ¡les ha costado tanto llegar!, y ahora les quitan el juguete de las manos. Pero estoy convencida de que a muchos de ellos ya les seduce la idea de escurrir el bulto, agotados todos los conejos que pensaban tener en la chistera…incluso su propia responsabilidad de haber retrasado una reforma para intentar salvar a Javier Arenas (que lo salva igual “porque lo necesito yo”) se diluye a la velocidad en que todo se ve engullido por la incertidumbre y el desánimo.
Comparto con Jesús Cacho la idea de que aún hay tiempo, pero la mayor parte habrá que gastarlo en reclutar, pues si los tiempos que vienen son nuevos, también nueva habrá de ser la tripulación. Y si hay que aprender a sembrar, se aprende. Cualquier cosa antes que concentrados de inútiles o salvapatrias visionarios que los quiten de en medio a golpe de pistola.

domingo, 17 de junio de 2012

La Ley soy yo. Por Mario Conde


Después de lo ya ocurrido, que el presidente del Supremo dimita, se fuerce su cese o continúe por un tiempo más tiene importancia, claro, por tratarse de la cima del Poder Judicial, pero relativa.
El daño ya está hecho. La imagen de la Justicia ha sufrido un nuevo golpe. El responsable no es el mensajero ni los medios de comunicación que informan, mejor o peor, de unos viajes inexplicables o muy mal explicados. La responsabilidad deriva de los hechos. Y a ellos hay que ceñirse, al menos en lo que al plano jurídico penal se refiere. Rechina que en algo tan aparentemente simple como valorar esos hechos, el Tribunal Supremo se divida en dos grupos: los que observan posible delito y los que no encuentran los elementos delictivos. Es difícilmente creíble que esa división responda sólo a análisis jurídico.
Y eso daña, todavía más. En fin, un destrozo. Pero ha servido para sentir que determinados miembros del aparato judicial, amparados por el Sistema, se consideran por encima de los ciudadanos e instituciones, en una conciencia de falsa superioridad. No se sienten servidores de Ley, sino que parecen responder al modelo de la Ley soy yo, la Justicia soy yo, el Supremo soy yo. Si la ley no se ajusta a sus deseos, ellos son la Ley, y como lo son, en ocasiones sienten que no necesitan estudiarla en profundidad ni seguir sus modificaciones. Y como son la ley, amenazan a órganos del Estado: no cumplir mis órdenes es delito, aunque eso implique para el amenazado desobedecer la Ley. Muchos jueces y fiscales se sienten sólo servidores de la Ley. Y también son víctimas, como los demás, de quienes se consideran por encima de ella. Si la sociedad civil quiere un verdadero Estado de Derecho, debe ejecutar una auditoría a fondo de los comportamientos judiciales, para erradicar ciertos modos de pensar y de actuar. Cuestión de personas. No se trata sólo ni preferentemente de exigir responsabilidades, sino de construir un modelo eficaz para la salvaguarda de nuestras libertades.

viernes, 15 de junio de 2012

¿Qué sería de ellos si fueran independientes?


Cataluña, líder en deuda de todas las CCAA

Ubicación de Cataluña

La Generalidad debe 42.000 millones de euros, casi el 30% del total de todas las regiones de España.
Cataluña lidera el ránking de la deuda de las Comunidades Autonómas. La Generalidad registra en 2011, 42.000 millones de euros, un montante que representa el 28,9% del total de toda la deuda acumulada en todas las regiones de España.
Madrid, en segundo lugar, registra el 40% de lo que debe Cataluña, 16.572 millones de euros. La Comunidad Valenciana, con una deuda de 15.373 millones de euros. Entre las tres acumulan el 50,9% del total del endeudamiento regional.
La deuda total ha aumentado un 15,7% interanual en el primer trimestre, hasta 145.118 millones de euros (el 13,5% del PIB), la cifra más alta de toda la serie histórica, según datos del Banco de España. Además, la deuda de las comunidades autónomas experimentó un incremento del 3,5% respecto al cierre del 2011, cuando se situó en 140.083 millones de euros.
Los datos muestran que desde el año 1995, el endeudamiento de las regiones no ha parado de crecer, batiendo en cada ejercicio récords históricos, a pesar del compromiso de estabilidad presupuestaria adquirido en los últimos años.
Además, la deuda de la Administración Central ha aumentado un 13,6% en el primer trimestre, hasta 592.572 millones, mientras que la deuda de los ayuntamientos ha bajado un 1,2% y se situó en 36.860 millones.

miércoles, 13 de junio de 2012

¿Cuando fue la última vez que alguien aseguró de modo solemne que los problemas del euro se habían terminado? ¿En que momento una autoridad de algún orden precisó rotunda que las tensiones que afectaban a la llamada moneda única habían concluido? No lo se, porque ya no presto atención a ese tipo de declaraciones, siendo consciente, como soy o pretendo ser, que forman parte del ciclo negación/afirmación/negación. Se niega la mayor, se comprueba la falsedad del aserto, se celebra reunión, se vuelve a negar y así sucesivamente. La Unión Monetaria se deteriora a sí misma con semejante proceder. Seguramente es que no cabe otra alternativa, pero es así. Y digo que es difícil un comportamiento distinto porque se parte de lo real: el diseño del euro, la panacea, el gran activo electoral con el que Aznar se presentó en las elecciones del 2000, es un diseño mal concebido y peor ejecutado. Algunos pocos, como he insistido en varias ocasiones, lo teníamos muy claro, pero contradecir la doctrina oficial de esos días era altamente peligroso, como la experiencia ha demostrado.

No solo cuestiones técnicas sino, además, políticas. Ayer mismo, en el programa el Gato al Aguda, Recarte insistió en la idea de que vivimos una crisis del euro. Yo fui algo mas allá y, sin dejar de reconocer que eso es cierto, lo enmarqué en algo superior: vivimos la crisis derivada del fracaso de un modo de concebir la idea de Europa. Pero, en fin, volver ahora sobre eso es cansino, aunque va a resultar imprescindible. Hoy, como ayer, se comenta que la UE diseña una política de emergencia por si Grecia abandona el euro. Lo que realmente importa a la UE no son las consecuencias para Grecia de esa eventual decisión, sino para la propia UE, es decir, para el sistema de poder generado en torno a la idea burocrática de Europa. No se ocupan preferentemente de los griegos, sino de ellos mismos Y es comprensible porque en todas partes cuecen las habas del postulado ¿de lo mío qué?.

La última advertencia viene de Lagarde, la directora del FMI: “Christine Lagarde cree que el euro dispone de menos de tres meses para salvarse”.  Para salvarse. La palabra, dejando a un lado posibles excesos de traducción, expresa bien los términos del drama que se vive en torno a esa llamada moneda única. Es inconcebible que en el 2012 estemos en una crisis en la que el euro, vendido como el gran invento financiero/político que iba a terminar con la pobreza, las guerras, las divisiones, y no se cuantas cosas mas en Europa, en el que se han invertido ingentes cantidades de dinero, que ha cambiado gobiernos democráticos en países de vieja solera como Italia, se encuentra situación en una encrucijada -otra más- definida en términos de salvación o muerte.

 Algo, aparte del diseño inicial, han tenido que hacer mal, muy mal, pésimamente mal.  Y no conviene llamarse a engaño: ellos lo saben. Conscientes del error de base y sus derivadas en el tiempo, protegen al euro para autoprotegerse, a costa de lo que sea. Lo que sucede es que la realidad muestra que es cada día mas difícil. Pero la huida hacia adelante es siempre el sendero a recorrer en estos casos.  Por ello la tesis de la cesión de  la soberanía fiscal. En estas condiciones, con un modelo tan herido, no me parece lo mas prudente, pero, claro, se entiende que es la única manera que algunos ven de terminar con estos problemas. Otra cosa es si aparecerán otros y mas graves como consecuencia de la citada “solución”.  Aparte de que debería saberse que esa cesión de soberanía, hoy por hoy, implica convertirse en una especie de “lander” alemán. No es broma. Lo apunté en mi libro “De aquí se sale” que vio la luz el pasado septiembre. Han transcurrido ocho meses des e es instante y la idea sigue  viva, agazapada, cuando no escondida, tras la idea, mal comprendida, de los eurobonos….

Ya se que el mantra de mas Europa es del agrado de muchos. Ellos lo saben. La inducción se basa en vender esos mantras de agradable sabor para la masa, porque son deglutidos sin apenas ser reflexionados. La gente, al menos cierta gente, repite, reproduce, copia y pega en su mente lo que lee, escucha, oye, ve. El proceso es simple: se consigue penetrar por inducción en la mentalidad colectiva. Por eso en Cosas del Camino escribí: “Cuando la democracia descubrió el poder de la inducción se convirtió en Sistema”. Como dice un amigo mío esto es lo que hay. De acuerdo, pero la pregunta sigue viva: ¿se puede cambiar? No fácil porque ellos disponen de ese poder de inducción. Cada día mas limitado, es cierto, pero sigue vivo. Y lo que es mas curioso: ciertos mantras del pasado, a pesar de haber chocado violentamente contra la dura realidad, no se abandonan tan fácilmente. Incluso puedo decir mas: se abandonan verbalmente pero siguen grabados en algún lugar del interior en el que cuesta arrancarlos.

Bien, el próximo domingo Grecia. Admitamos que son muchas las presiones ejercidas sobre los griegos para evitar su salida de la UE. Me parece recordar que, incluso, Obama les advirtió de la conveniencia de seguir en el modelo de la moneda única. Mal llamado, por cierto, porque como ya he señalado en varias ocasiones no tenemos en  realidad una moneda única sino un instrumento de pago único, que no es lo mismo. Pero dejemos eso ahora. ¿Cambiará algo después de las elecciones griegas?. No lo creo. Y eso que la prensa advierte de que la UE toma medidas para corregir los posibles desperfectos. Manejan el corralito y la limitación de circulación de capitales y personas. En el fondo son medidas dirigidas a introducir temor en el votante griego. No se que sucederá pero previsiblemente poca cosa. Quizás me equivoque, peso es como lo veo. Es demasiado el almacén de intereses acumulado en torno a la creación de esa UE burocrática y nacida con déficit democrático. Pero es lo que hay. Algunos dicen que la salida de Grecia es mala para España. Yo no se si estoy de acuerdo. Me da la sensación de que sería la mejor solución para los griegos, pero no dudo que causaría turbulencias y que podría afectarnos en el corto plazo. Pero deberíamos pensar primero en los que deciden -ellos, los griegos- y no solo en las consecuencias para nosotros. Pero, insisto, en el fondo, digan lo que digan a pesar de ese supuesto espíritu europeo, sigue funcionando el viejo postulado ¿y de lo mio qué? Y con todo algunos quieren hablar de una identidad de nación europea…En fin.

lunes, 11 de junio de 2012

¿Se puede criticar a este gobierno sin recibir insultos en lugar de argumentaciones?


Acabo de llegar a Madrid. Dejé atrás, en As Frieiras, aparte de los ocho cachorros que crecen con fuerza, un día lluvioso y un punto de esperanza, porque esta mañana, a eso de las ocho y media, los optimistas insistían en que los mercados asiáticos acogían con cierto alborozo -por llamarlo de alguna manera- la concesión de ayuda  España por parte de la UE. Dudaba yo que a aquellas gentes de Asia, que tienen sus asuntos propios, que tampoco son un regalo, les importara demasiado que nuestro país recibiera una apertura de crédito por importe de 100.000 millones de euros, pero mejor contentarse que cuestionar, aunque solo sea porque no recibimos ni una sola buena noticia económica o política en los últimos meses.
Durante el trayecto recordaba algo que me llamó la atención en nuestras conversaciones de ayer. El diario El País -respecto del cual mi postura no es dudosa- entrecomillaba una frase de Rajoy que venia a decir algo así como que se iba a Polonia -creo recordar- a ver a la selección nacional porque la situación estaba resuelta. Seguramente no es literal mi transcripción, pero en cualquier caso es muy parecida y sobre todo se entiende el significado. A mi me llamó la atención y como desconfío de ese medio lo entrecomillé y pregunté si eso sería cierto, porque me parecía que en un día como el de ayer, asegurar que uno se va al fútbol porque la situación está resuelta no era, en mi modesta opinión, lo que podríamos llamar un acierto de comunicación.
El hecho es que se produjeron reacciones adversas, en medio de una abrumadora proporción de quienes no entendían  al Presidente. Pero los adversos, como digo, que fueron mas bien muy escasos, se dividían en dos bloques. Los primeros, nada políticos, aseguraban que el Presidente tiene derecho a ir a ver a la selección en sus ratos libres, lo cual está fuera de duda. Pero no era eso lo debatido. Otros llegaban a afirmar que incluso era obligación de Rajoy asistir a esos encuentros, lo que me merece cierta duda. Y, por fin, dentro de ese conjunto, un chico de apariencia joven, al menos en función de su avatar, sentenció que el Presidente con su dinero hace lo que quiere. Me sorprendió la candidez del comentario y con ganas de conducir por el sendero de la comprensión de como funcionan estas cosas le apostillé, en tono de pregunta, si creía que esos movimientos se los paga cada uno con su patrimonio. La respuesta fue sorprendente. “nadie ha dicho que no se lo pague de su bolsillo”.
Desde días atrás, como seguramente habréis observado los que consumís paciencia en leerme, utilizo la expresión fans para referirme a algunas personas en su modo de relacionarse con los partidos y sus líderes. Me refiero a los partidos políticos, no a los del fútbol, que son otra cosa. Seguramente la palabra tiene genética anglosajona pero para mi tengo que podría haber nacido de fanático, que es castellana, elocuente y comprensible para casi todos. Pues bien, dudé mucho de si la actitud de ese chico era fanatismo o ignorancia. Me incliné por la segunda opción, aunque tuve que admitir que la cantidad de desconocimiento y su calidad era lo suficientemente potentes como para extrañarse  de su presencia en nuestras conversaciones. Pero, en fin, eso fue lo que concluí.
Otro grupo comenzó por negar la mayor: Rajoy no ha dicho eso. El primero y mas activo añadió a continuación que asegurarlo era ser un manipulador. La verdad es que lo puse entre comillas, dejé claro que era El País y expresé mi duda. Con todo, el insulto. ¿Manipular? Pues sería el medio, pero en fin. Al personaje en cuestión se sumaron tres o cuatro mas, y todos en el mismo tono, hasta que apareció uno que, refiriéndose a mi, aseguraba que yo lo que tenia era afán de protagonismo, deseo de causar lío en las redes sociales y todo para presentarme a las elecciones europeas de 2014.  Lo leí un par de veces y siempre con idéntico resultado. Aunque costara creerlo un chico joven, insisto, por apariencia de su avatar, decía semejante cosa, como si le preocupara que me presentara a las elecciones europeas. Defendía que Rajoy no dijo lo que dijo, aun a pesar de que varios trajeron el video de you tube en donde se mostraba de modo incuestionable esa frase, aunque he de reconocer, como hice ayer, que sacarla totalmente de su contexto no era del todo correcto. Pero eso de insultar, negar lo obvio y hasta acusar de que en esa negación se esconde un deseo de protagonismo en redes para acudir en lista a las elecciones europeas, hay algo que podría resultar extraño, pero que tiene un nombre: fanatismo. Pero, claro,el fanatismo puede sustentarse sobre intereses de diversa naturaleza. Ni se ni me importa de que viven las familias de esos objetores pero quizás pudiera la averiguación aportar algún dato sobre esa preocupación por las elecciones europeas. Quizás no sea asunto económico/familiar. Tal vez se trate simplemente de modo de pensar. Puede. Nunca se sabe. Tampoco me importa demasiado, la verdad.
Ya me había ocurrido en alguna ocasión que si criticaba una decisión del gobierno actual, en lugar de responder con argumentos contradictorios, se descolgaba algún comentario en tono de pregunta del siguiente tenor: ¿Pero usted no es de derechas?. No me sorprende, porque ya tengo edad y experiencia, pero no deja de ser llamativo que después de lo que nos ha tocado vivir como país, para ser de derechas, según esos escasísimos acusadores, haya que renunciar a criticar cualquier decisión de tu partido o de tu gobierno. Pero así son algunos. Si extrapolo lo nuestro en Twitter son ínfima proporción. No me preocupa el número y la calidad, sino que me sonroja un poco leer esas cosas.
Un día dije en TV Intereconomía que los peores enemigos del Rey son aquellos que sostienen que todo lo que haga el Rey está bien por el mero hecho de ser Rey. No es que sea una tontería, es que es una tontería peligrosa. Quienes sostienen a su partido a base de negar las evidencias, de insultar quienes simplemente discrepan o a catalogar como de derechas al que asiente sin la menor critica, son, creo, lo fans por excelencia, que causan mas daño que otra cosa, no a la sociedad sino, precisamente, al partido que quieren defender.Si para proteger políticamente a Rajoy hay que hacer esas cosas, mal asunto, pero para Rajoy y su partido, ademas, claro, para esos defensores incluidos en el grupo de fans.
La clase política ha generado este modo de pensar. Los vínculos se tejen con intereses. Cada día estoy mas convencido de una vieja idea de mi juventud: nada conseguiremos mientras no cambien ciertos modos de pensar. Afortunadamente son minoritarios, muy minoritarios, pero ahí están. No se si la crisis acentuará los fanatismos de uno y otro costado. Hemos visto que en Grecia así ha sucedido. Esperemos que en nuestro país esas cosas queden instaladas en la anécdota y no asciendan a la categoría.
Bueno y ahora, poco antes de salir a una reunión, me encuentro con que del 6 por 100 de incremento  de la Bolsa visto esta mañana y justificado en la magnifica negociación del Gobierno, apenas queda un 1% y que la prima de riesgo no solo no baja sino que recupera el nivel de los 510 puntos. No parece que los mercados, los malditos y conspiradores mercados -que dicen muchos- se hayan tomado en serio lo de que la negociación del Gobierno español es un rotundo éxito y que la situación está solventada. Incluso un periódico como el Financial Times decía con grandes titulares que Rajoy vendía el rescate como éxito, con algo mas que un punto de ironía anglosajona, que es como la latina pero con mas mala uva. De momento no digo mas porque si no algunos asegurarán que mi manía es meterme con el gobierno. Les voy a llevar un día a ver lo que pasa con las nóminas, los proveedores, los bancos, y quizás entiendan que nuestros problemas no son alabar ni criticar al gobierno, sino seguir viviendo. Lo malo es que las decisiones políticas influyen en nuestras vidas. Durante años hemos vivido sin querer darnos cuenta de eso. Ahora lo sentimos en nuestras carnes, al tiempo que nos percatamos lo solos que estamos en una sociedad civil totalmente desarbolada.
Bueno, seguiremos…

domingo, 10 de junio de 2012

Jueces como problema real. Por Mario Conde en su blog de Intereconomia

Son servidores de la Ley, no de sus preferencias u obediencias.

Por primera vez en nuestra historia reciente la Justicia desciende en la valoración de los españoles a los humillantes niveles que se dedican a la clase política. Lo peor es que se mete en el mismo saco del rechazo a jueces y fiscales que cumplen con su obligación y que son ajenos en sus decisiones a cualquier forma de corruptela. Pero esa valoración muy negativa es comprensible y debida, sobre todo, a personas singulares que asombran a abogados, justiciables y público en general con sus decisiones y actitudes. La corrupción en la Justicia tiene varias derivadas: la económica (dinero) la política (poder, promoción), la prepotencia (abuso) y la ignorancia. Asombra cómo se margina a la Ley civil –que deben obedecer– en la Jurisdicción Penal. Y todavía peor: algunos creen que ellos definen lo justo y si su definición tropieza con la Ley, la apartan en sus decisiones.
No son jueces, sino justicieros, que se consideran superiores al legislador. Y dicen pertenecer a la escuela del realismo jurídico. Mal asunto la prepotencia de jueces, fiscales y secretarios judiciales. Son servidores de la Ley, no de sus preferencias, obediencias o ambiciones. No se solucionará el asunto capital de la Justicia sin una auditoría del funcionamiento real de determinadas instancias judiciales, con nombres y apellidos. El poder político debería abordarla con juristas independientes. Yo lo haría. Comencé a darme cuenta nada más comenzar mi andadura de abogado del Estado. Y mi experiencia larga y densa lo evidencia. Admito que en estas opiniones soy juez y parte, pero no se me nubla la vista. Considero el Derecho pieza capital de nuestra convivencia y cuando contemplo la injusticia de la Justicia, más valoro el verdadero Derecho. Si lo justo es lo que conviene al juez (por dinero, poder o ignorancia), hemos terminado con el Derecho. Y por ello con la libertad. 

sábado, 9 de junio de 2012

El FMI da otro empujón al Gobierno para que pida el rescate de la banca con una cifra: 40.000 millones


En medio de los rumores de que el Gobierno solicitará este mismo sábado el rescate de su sistema bancario, el Fondo Monetario Internacional, que aportaría parte de los fondos para el préstamo, ha adelantado 48 horas el informe sobre las necesidades de capital de la banca previsto para este lunes. Cifra en una horquilla de entre 37.000 y 40.000 millones la aportación que necesita el sistema financiero



En medio de los rumores que indican que el Gobierno español solicitará hoy el rescate de su sistema bancario, posibilidad que ayer negó el Ejecutivo, el Fondo Monetario Internacional (FMI) decidió adelantar a la madrugada del viernes al sábado la publicación de su análisis del sector financiero español, prevista para el lunes. Según este informe, España necesitaría un mínimo de 37.000 millones de euros para salvar a sus bancos en un escenario que es “extremo” pero “plausible en las actuales circunstancias”. 
En ese escenario, el PIB caería el 4,1% en 2012 y el 1,7% en 2013. El precio de la vivienda se desplomaría el 19,8% este año y el 3,6% el que viene. La tasa de desempleo alcanzaría el 26,6% de media en 2013. Y la inflación se reduciría al 0,2%.
Ésas son las coordenadas del "escenario adverso" del Fondo Monetario Internacional (FMI) para la economía española. Un escenario adverso bajo el cual los bancos necesitarían probablemente más de 40.000 millones de euros para recapitalizarse, según ese organismo. Eso supone aproximadamente el 4% del PIB español.
Esos 40.000 millones incluyen una parte del dinero público ya comprometido en el rescate de Bankia, aunque el Fondo no ha especificado cuánto. Eso se debe, según los responsables de la entidad, a que cuestiones como la reevaluación de las participaciones industriales de acuerdo a su valor en el mercado (‘mark-to-market’) o la consideración de determinados créditos como irrecuperables es algo común en todos los procesos de reestructuración.
El escenario 'favorable'
El informe también incluye un escenario favorable, en el que 'sólo' serían necesarios 25.000 millones. Pero eso es, simplemente, imposible. La clave es que, para que eso se dé, el PIB español debería caer un 1,6% este año y crecer un 0,1% el que viene. A su vez, para que se dé esa situación, el déficit público debería haber sido del 6% en 2011. En realidad, el desequilibrio llegó al 8,9%, lo que a su vez obliga a un ajuste mayor, dispara los intereses de la deuda y, en definitiva, sepulta al país en una recesión aún mayor.
Fuentes financieras interpretan el adelanto del FMI como la señal de que España planteará hoy el rescate de sus bancos en la tele conferencia que mantendrán los ministros de Economía y Finanzas de la zona euro. La cifra referencia será la estimada por el FMI, pero el volumen final de ayudas del fondo de rescate europeo se concretará tras las auditorias a toda la cartera crediticia del sector que están elaborando Rolando Berger y Oliver Wyman.
E
El documento del FMI distingue en cuatro apartados al sector financiero español. De BBVA y Santander asegura que no necesitarían aumento de sus reservas en el caso de llegar a este escenario adverso. Después distingue a las antiguas cajas que no han recibido ayudas. Son siete, con un total del 17% de los activos. En tercer lugar, a las antiguas cajas de ahorros que han recibido ayudas públicas. Son siete en total y, con diferencia, suponen el sector más vulnerable ya que tienen una exposición en préstamos a la construcción y al sector inmobiliario “fuerte”. Acumulan el 22% del ahorro en el sistema bancario. Por último, los bancos pequeños y medianos, que absorben el 11% de los depósitos y son, tras las cajas ya intervenidas, las entidades más expuestas a los sectores inmobiliarios y de la construcción.
El examen del Fondo incluyó pruebas de resistencia o test de estrés del sector bancario, realizadas con el objetivo de evaluar las vulnerabilidades —entre otras situaciones, teniendo en cuenta un deterioro grave de las condiciones económicas—, que se basaron en datos confidenciales y detallados de cada banco.


jueves, 7 de junio de 2012

Aguirre se baja un 10% el sueldo y recorta en un 3,3% el de los funcionarios


  • La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, junto al vicepresidente y portavoz regional, Ignacio González.

  • El Consejo de Gobierno de la Comunidad aprueba mañana una reducción salarial del 3,3% a los empleados públicos. Reduce un 10% la jornada laboral y el sueldo de los interinos salvo los docentes y aquellos que trabajan en servicios sociales.

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, está decidida a cumplir el objetivo de déficit de 1,5% acordado por el Gobierno nacional con las autonomías. Para ello, mañana aprobará una reducción del sueldo de los empleados públicos y altos cargos de la Administración autonómica."Por primera vez desde que gobierna, la presidenta autonómica reducirá el sueldo de los trabajadores públicos—la rebaja anterior fue decisión del Gobierno que presidía José Luis Rodríguez Zapatero-- una media del 3,3%, inferior, en todo caso, al 5% de la rebaja practicada, por ejemplo, por otras comunidades autónomas como Andalucía, Cataluña y Canarias. Esta reducción incluye también a la paga extraordinaria del mes de diciembre", explican fuentes del Gobierno regional.
Los altos cargos y puestos de confianza, la propia presidenta, los consejeros, viceconsejeros y secretarios generales técnicos sufrirán un recorte superior, que alcanzará el10%. Además, los viceconsejeros que son diputados autonómicos dejarán de percibir la asignación adicional de 1.000 euros al mes que reciben por compatibilizar su labor en el Gobierno con la Asamblea.
Interinos
Aunque el Plan de Ajuste presentado ante el Ministerio de Hacienda recogía la reducción máxima del personal laboral, el Gobierno de Aguirre pretende evitar el despido de los trabajadores y por ese motivo, para mantener al máximo número de empleados, la Administación autonómica rebajará un 10% la jornada y el sueldo de los interinos, excepto a los docentes y a los asistenciales, y se amortizarán las plazas vacantes.


http://www.intereconomia.com/noticias-gaceta/madrid/aguirre-bajara-un-33-sueldo-los-funcionarios-y-un-10-cargos-politicos-2012060

lunes, 4 de junio de 2012

FUNERAL POR JESÚS TRASOBARES VALENCIA/BARCELONA/MADRID/OVIEDO/CARTAGENA/LAS PALMAS/LA CORUÑA





FUNERAL POR JESÚS TRASOBARES


El próximo martes día 5 de junio se celebrará en Valencia, en la Iglesia parroquial de San Andrés, calle Colón, nº 8, a las 20.00 h.,  el funeral por nuestro querido e inolvidable amigo Ever.
Ante la imposibilidad de que todos asistamos a Valencia, se celebraran el mismo día misas en Madrid y Barcelona.

Barcelona: Templo Nacional Expiatorio del Sagrado Corazón de Jesús (TIBIDABO) A las 19.00 h.

Madrid: Iglesia de San Juan de la Cruz, plaza de San Juan de la Cruz, nº 1-2. A las 20.00 h.



Oviedo: IGLESIA SANTA MARIA LA REAL DE LA CORTE  Plaza Feijoo. A las 19.30 h. 


Cartagena:  a las 19.00h en San Gines d la Jara. Junto a la UNED

Las Palmas de Gran Canaria: Iglesia del Cristo. A las 19.0 Calle Aristides Briand , 18

Playa de las Canteras   LasPalmas de Gran Canaria

La Coruña,  en la Parroquia Santa Lucia , Plaza de Lugo, 3, a las 20.00

Si alguno queréis hacer algo en otros puntos decidlo aquí para que se pueda acudir.











domingo, 3 de junio de 2012

Rato y la honradez moral. Por Mario Conde

Rodrigo Rato, ex ministro de Economía, ex director del FMI y ex presidente de Bankia, presentó el pasado jueves una carta, creo que en el consejo de Caja Madrid, en la que analizaba “el Plan de Recapitalización de Bankia por importe de 22.000 millones de euros”. En una primera puntualización aclara que el importe real es de 22.000 millones de euros, aunque debido a una serie de ajustes técnico-contables se queda en 19.000 millones, que es la cifra oficial difundida por los nuevos gestores para reclamar fondos al Estado.
Lo que me importa de esta carta es la siguiente frase: “En efecto, se trata de provisiones contables y no de pérdidas reales ya producidas con salida de caja alguna; son provisiones por posibles pérdidas futuras, bien sea porque la cartera de participadas o los inmuebles adjudicados valgan menos en el futuro cuando se tengan que vender y se vendan, bien sea porque en el futuro se produzcan mas impagos de préstamos (mora)”. Correcto. Es exactamente lo que expliqué en un programa de Intereconomía y lo que publiqué en un artículo en el Foro de la Sociedad Civil. Así es: las provisiones no son técnicamente pérdidas. Ni hoy ni nunca. Es más, debería añadirse que la experiencia contrastada demuestra que esas provisiones en épocas de recesión se recuperan en alto porcentaje en las de bonanza.
Pero lo que reclama mi atención es algo mucho más denso, importante y de mayor calado nacional y personal que una mera obviedad técnico-contable bancaria. Me refiero al caso Banesto y su comparación con Bankia. En 1993, Rodrigo Rato era portavoz económico y hombre claramente ligado a Aznar, entonces líder de una oposición poco valorada que acababa de perder unas elecciones generales por segunda vez. Pocas dudas quedan, salvo para quienes quieren vivir divorciados de la verdad, de que existió un acuerdo entre Aznar, líder de la oposición, y González, secretario general de un PSOE que, por primera vez, daba muestra de cierta rebeldía frente a su líder, a la sazón presidente del Gobierno. Ambos acordaron intervenir Banesto. Su argumento: el presidente de ese banco controlaba medios de comunicación y su actuación y discursos afectaban al Sistema. Por ello, sometiendo al Banco de España, gobernado por un débil gobernador, ya fallecido, de nombre Rojo, y utilizando como arietes a Narcís Serra, vicepresidente del Gobierno, y Miguel Martín, subgobernador político del Banco de España, consumaron la operación política. Luis María Anson lo explicó, como testigo presencial, en Intereconomía.
¿Cómo lo hicieron técnicamente? Bien fácil: encargaron al Banco de España que transformara provisiones en pérdidas. Primero le dijeron que que se inventara provisiones, como, por ejemplo, el crédito de Juan Miguel Villar Mir. Ordenaron adicionalmente que provisionaran incluso créditos a entidades públicas, que técnicamente no son provisionables. A continuación, sentenciaron: ese monto son pérdidas reales y para dotar de dimensión popular al caso calificaron al engendro contable de “agujero”, que es expresión impactante para la opinión publica. A continuación, convocaron de urgencia al Parlamento, nada menos que un 30 de diciembre, para evidenciar que todos los grupos políticos –insisto, todos– sin analizar ni una línea de balances o cuentas, declarasen magníficamente intervenido Banesto, y proclamasen, a instancia del diputado Montoro, la exigencia de responsabilidad de todo tipo a su presidente y consejeros.
Rodrigo Rato no supo de la intervención hasta que, en la mañana del día 28 de diciembre, su primo, mi querido amigo Vicente Figaredo, se lo dijo por teléfono. Rato consultó con Aznar y este lo confirmó: “Si Mario Conde vende al BBV y se va, no pasa nada” ¿Qué hizo Rodrigo Rato? Seguir la línea oficial que Aznar impuso en el PP –no todos participaban de ella– y González en el PSOE: hablar de agujero, de pérdidas, de quiebra y de responsabilidades penales. Nunca aclaró que Banesto no tenía pérdidas reales, definitivas, sino potenciales. No dijo entonces, en su condición de responsable económico del PP, lo que hoy relata y precisa, con razón, de sí mismo. Ante dos situaciones idénticas, en un caso se apuntó a la política de partido movida por intereses oscuros. En otro, el suyo, el de Bankia, a la pura técnica de contabilidad.
Siempre he dicho que no soy juez, que no me gusta juzgar, que no guardo rencor y que creo en algo Superior. Hoy Rodrigo Rato explica su actuación con algo evidente, pero que negó a otros en idéntico caso. Y que sirvió de excusa para privarles de libertad y de hacienda. Y dicho esto, añado: es inmoral e injusto trasladar toda la responsabilidad de Bankia a Rodrigo Rato. Tiene razón cuando aclara que esas provisiones de Bankia vienen de “inversiones inmobiliarias que se hicieron en el pasado”. Es obvio. Tiene responsabilidad, claro, pero ni mucho menos exclusiva. Ni siquiera principal. Y no sólo por lo de las pérdidas potenciales, sino porque un hombre solo ni aunque se empeñe es capaz de provocar un daño de semejante dimensión en una entidad bien organizada, en la que existen directores, gestores, auditores internos... Pero hace 20 años se empeñaron en convertirme en el único responsable de un agujero inventado. Allí estuvo Rodrigo Rato. Hoy está aquí, peleando por decir lo que entonces negó, o cuando menos no se atrevió a desvelar en su verdadera dimensión.
Y como sigo siendo romántico, me pregunto: a la vista de todo esto, ¿tendría Rodrigo la honradez moral, personal y política de contar a la opinión pública por qué hicieron lo que hicieron con Banesto, conmigo y derivadamente con miles de personas? La historia y la verdad se lo agradecerían y yo, en mi nombre, en el de familia y amigos, consejeros y directores de Banesto de entonces a quienes alcanzó injustamente el agravio y el insulto. Y creo que a corto plazo él se sentiría más a gusto consigo mismo consumiendo verdad reconocida que mentira falseada. Es un servicio a este país. No quiero retornos al pasado sino construir futuro, y este se edifica mucho mejor desde la verdad que sobre la falacia. Ni el rencor ni la venganza ocupan un sitio, por ínfimo que sea, en mi interior. Pero ojalá cumpla Rato con ese deber moral. En cualquier caso, haga lo que haga, yo seguiré ayudándole porque la verdad, como la fidelidad, no se basa en reciprocidades ni en intereses de clase o de otra naturaleza. En castellano disponemos de una palabra llamada dignidad. Suficiente.


http://www.intereconomia.com/blog/blog-mario-conde/rato-y-honradez-moral-20120602

sábado, 2 de junio de 2012

De los juicios políticos. Por Mario Conde


Planteamiento
En mi opinión, un juicio político no es aquel que enfrenta a un político, en activo o en situación pasiva, a una acusación formulada por un fiscal y debatida ante un tribunal de justicia, nacional o internacional. La característica esencial de un juicio político no radica en el sujeto —político o no— ni en el tipo de acusación, sino en las consecuencias derivadas del fallo que se dicte. Si la resolución final se traduce en efectos y derivadas para el Poder, entonces merecerá tal denominación. En otro caso será el juicio a un político o ex político, pero no un juicio político en sentido estricto.
Dado que en la sociedades modernas el poder político y el mediático conforman círculos secantes ajustados por intereses comunes, en todo juicio político la acusación y la defensa, con independencia de la propiamente jurídica, corresponderán a los medios de comunicación alineados como terminales del poder político en cada caso. Y desplegarán todas las armas a su alcance conscientes de que en juego está el Poder. Por ello, el grado mas elevado de juicio político es el que califico de juicio de Sistema cuando todo el poder político y todo el poder mediático —amén del financiero— se alinean en una dirección determinada y sin fisuras, precisamente por entender que las consecuencias de la resolución que se dicte afectan de manera directa e inmediata, de presente o de futuro, a todos sus intereses, esto es, al Sistema en su conjunto.

El juicio a Garzón
Con estas precisiones conceptuales se puede abordar lo sucedido y por suceder en un llamado juicio político: el que afecta al juez Garzón. ¿Es un juicio propiamente político? Si somos coherentes con lo que acabo de exponer deberemos preguntarnos por las consecuencias en términos de poder derivadas de una condena o de una absolución del magistrado. No las veo con la nitidez y precisión suficientes como para incluirlo en esta categoría. La sustancia del casus judicandi no es política, por mucho que lo sea —sin la menor duda— la materia en la que se ejecutan, el campus judicial en el que se dictan los actos judiciales juzgados.

El juez ahora encausado dictó resoluciones que la acusación califica de injustas y a sabiendas en un proceso en el que se investigaban los llamados crímenes del franquismo. Se trata de algo tan concreto y jurídico como autos y providencias, es decir, decisiones pura y estrictamente judiciales. Básicamente se trataba de autos y providencias en los que asumía una competencia investigadora —antes negada por él mismo en casos de similar naturaleza— y ordenaba la práctica de diligencias determinadas. El delito de prevaricación, que es el que conforma la acusación, es independiente de la naturaleza del proceso de que se trate. Puede cometerse en cualesquiera de las variedades procesales admitidas por el Ordenamiento Jurídico y no, evidentemente, en exclusiva en un proceso penal. Arrendamientos urbanos, rústicos, pleitos matrimoniales, sucesorios, penales, mercantiles, administrativos… en todos ellos caben resoluciones judiciales injustas dictadas a sabiendas. De modo que si esas resoluciones son, como se pretende por la acusación, injustas y a sabiendas, el hecho de ser cometidas en un proceso penal de investigación de crímenes cometidos en el franquismo es un dato de sustancia política, pero inerte en la caracterización jurídica.

Ocurre que la sustancia de fondo, el tipo de proceso, el objeto material sobre el que versa, no solo tiene naturaleza política, sino que es política en su grado mas elevado: crímenes cometidos en función de una determinada ideología. ¿Alguien puede acaso dudar de la conveniencia política, moral y social de investigar unas víctimas que perdieron la vida a consecuencia de asesinatos de corte ideológico? Obviamente, no. Y la precisión es aplicable al franquismo, a los crímenes de la dictadura soviética, a los cometidos por jemeres rojos, a los de diferentes dictaduras que ha conocido la historia, los de las Monarquías absolutas y hasta de regímenes que subsisten en la actualidad, curiosamente encerrados en ciertos aplausos y alabanzas de unos grupos de personas que prefieren, al menos en esos casos, la ideología al derecho a la libertad y la vida. Sucede en cualquier orden de violación de los derechos humanos. La aproximación moral es incuestionable.

Ahora bien, esa aproximación, esa conveniencia, es un juicio de valor. Para acceder al mundo del derecho necesita ser incorporada a la normativa jurídica. La ley disciplinará el modo y manera de tratar la conveniencia, el juicio moral, al ingresar en el mundo jurídico. Y la ley es la norma. Y si la ley se equivoca de modo y de maneras, no por ello el juez se encuentra autorizado para suplantar la voluntad del legislador, sobre todo si la ley es fruto de una deliberación de un órgano legislativo que reciba los atributos de legítimo y democrático, aunque solo lo sea formalmente, en el papel de una Constitución determinada. Si una ley aprueba una amnistía por considerar que es lo conveniente para la convivencia de una comunidad, aunque eso pueda repugnar a sentimientos de una persona que es titular de un órgano judicial, nunca estará legitimado para violentar la voluntad mayoritaria de la comunidad que se protege a sí misma mediante ese discutible expediente. Podremos tener juicio de valor de cualquier orden, pero no alterar a voluntad el orden jurídico. Si tal alteración la ejecuta un órgano judicial al dictar a sabiendas resoluciones injustas (ilegales), cometerá con ello el delito de prevaricación. Es así como la sustancia moral o política del fondo en modo alguno contamina la caracterización jurídica de la conducta judicial. Aunque quizá pudiera conformar un tipo de atenuante penal.

Las terminales mediáticas que defienden al juez Garzón, sustancialmente el otrora influyente El País, centran su atención en la sustancia del fondo y pretenden alegar que es imposible que un juez cometa prevaricación al investigar a las víctimas del franquismo. La pretensión es jurídicamente inculta, pero se quiere una vez mas tomar al rábano por las hojas. El insulto y descalificación de los miembros del tribunal que juzga, incluso por ciertos miembros de la propia organización judicial, evidencia hasta qué punto lo ideológico se antepone a lo lógico, aunque la lógica sea mas juridico-formal que otra cosa. Si el derecho se define como la forma civilizada de organizar la fuerza, la negación del valor de lo jurídico es una suerte de incivilidad y retroceso.

Una reflexión elemental: si fueran diáfanamente ajustadas a Derecho las resoluciones dictadas por el juez y juzgadas por el tribunal supremo, se necesitaría el brutal proceso de confusión, primero, y de acoso al tribunal. Confusión porque se insiste una y otra vez en que el juez es procesado por investigar al franquismo, lo que es, como acabamos de decir, absolutamente falso. Acoso por el proceso de descalificación que alcanza cotas difícilmente localizables en sistemas de vida occidental (fascismos, asesinos…)

¿Qué consecuencias en términos de poder se deducen de la absolución y la condena? La única localizable es la que afecta al grupo mediático Prisa, que ha consumido energías inconcebibles en un proceso en el que tiene necesariamente que estar en juego algo que desconocemos. De otro modo resulta inconcebible. ¿Arriesgar a ese extremo por convicciones? ¿Acaso va a conseguir que se juzgue al franquismo o solo intentan salvar al juez? Si el proceso que se dirime fuera decidir si procede o no el juicio esclarecedor de las víctimas, se entendería. Pero no es eso. Si Garzón es absuelto las víctimas seguirán sin ser investigadas. Y si es condenado, también. Por eso no se entiende el furor defensivo de Prisa. Tiene que existir algún motivo. En todo caso hemos de admitir que las posibilidades del fracaso del defensor mediático por excelencia son elevadas, porque se trata de tres juicios los que tiene abiertos el magistrado y es más que probable que en alguno de ellos pueda ser condenado y perder su carrera. En ese caso el huevo —la carrera— pesaría más que el fuero —motivo del juicio concreto en el que se dicte condena.

Sin embargo, sí existe una derivada estrictamente política: si el juez pierde la carrera no por ello quedaría inhabilitado para actuar políticamente. Y esto cuenta, porque para ciertos sectores su condena tendría naturaleza política, aunque carezca de ella, y se generaría un victimismo con tintes de martirio que conllevaría un activo político para determinados sectores de la sociedad española y hasta europea. ¿Hasta qué punto? Difícil predecirlo, pero ciertamente podría tener, en ese segmento reducido del voto, una importancia considerable. En ese instante, solo en ese instante hablamos de poder, y por consiguiente podemos utilizar el juicio político dado que la condena generaría consecuencias medibles en términos de poder, aunque sea hipotético y de envergadura dudosa.
Y aquí viene la siguiente derivada: eso solo sucedería si es condenado por el proceso del franquismo. Pero no si la condena deriva de practicar escuchas ilegales a abogados defensores y menos si es por pedir dinero a bancos y empresas utilizando su posición de Magistrado. Eso no aporta carisma. Ni martirio. Así que en ningún caso esos dos supuestos son juicio político. Y el del franquismo tendría la derivada de poder antes descrita en caso de condena. ¿Que ocurre si le absuelven del franquismo y le condenan por cualquier de los otros dos? Quizá lo veamos, porque esta hipótesis no es precisamente la mas descartable.

El juicio a Camps
El otro juicio político es el que afecta al expresidente de la Comunidad Valenciana, Francisco Camps. Aquí el atributo considero que está correctamente utilizado: el mero planteamiento del juicio, mejor dicho, la mera acusación contra Camps y sus proyecciones sobre el PP valenciano, ya derivaba en consecuencias de poder. Unas elecciones autonómicas en esa Comunidad podrían verse afectadas por la investigación judicial, aunque la realidad demostró que el voto ideologizado es más potente que la reflexión moral en ciertos casos. La ciudadanía, por lo que sea, quizá por incrédula, tal vez por pensar que en todos los cazos políticos se cuecen habas de corrupción, no disciplina su actitud electoral en base a ese tipo de acusaciones, sobre todo si son menores en lo cuantitativo, aunque no lo sean en lo cualitativo. Se necesita una corrupción esperpéntica en tamaño y formas para creer que puede condicionar el voto ideologizado.

Pero la apertura del juicio se tradujo en una consecuencia de poder: Camps perdió el poder de ser presidente, otro le sustituyó y se reestructuró el poder en el seno del PP valenciano. Y eso en una Comunidad tan importante no es algo baladí.

Llegó el juicio. Curioso que un hombre sea capaz de enfrentarse a un jurado popular después de que dos mandatarios políticos subordinados suyos aceptaran su culpabilidad. Sobre el papel las posibilidades jurídicas de salir indemne parecían muy escasas. Pero el jurado votó inocencia. ¿Extraño resultado?

Algunos dicen que el problema de juicios políticos con jurado consiste en que sus miembros, mayores de 18 años, son votantes de uno u otro partido, así que tendrán una inclinación política subyacente a culpabilidad o inocencia según la adscripción política del acusado. El jurado será, en esta idea, un reflejo del mapa de voto en esa Comunidad y, consecuentemente, traducirá sus conclusiones según su determinación como votantes.

No es excesivamente exagerado el juicio, pero, ¿qué hacer? ¿Llevar estos juicios a políticos concretos a otras comunidades autónomas? Al final sería más o menos lo mismo porque el bipartidismo es dominante. ¿Habría que juzgar a un político del PP en Andalucía —de momento, claro— y a un PSOE en Valencia? No parece serio. Por otro lado, ¿acaso la sala segunda del Supremo no refleja la estructura del poder político? ¿Acaso sus magistrados no son nombrados por cuotas políticas a través del Consejo General del Poder Judicial? ¿Dudamos de los jurados? ¿Y de los jueces? ¿Qué es mas fácil de manipular, un miembro de un jurado o un magistrado? No conviene olvidar que al final del día carreras profesionales y jubilaciones de magistrados dependen del Poder.
Todo eso lo que indica es que no nos creemos la limpieza judicial. Ciertamente, hay casos en los que esa incredulidad deriva de una evidencia lastimosa. ¿Habrá que reformar la Ley del Jurado? Pues quizá, pero siempre andamos a golpe de reformas con truenos de casos concretos. El Derecho Penal históricamente merecía mas respeto.

El País, acusador en el juicio Camps, ha perdido una batalla de manera sonora. Los titulares con los que acogió la derrota evidenciaban la conciencia del fracaso. Dijo “Un jurado profesional le habría condenado”. Una opinión, sin más fundamento que una conjetura, convertida en noticia de portada. Muy ilustrativo. Después aseguró que la inocencia jurídica no le excluía de la culpabilidad moral. Nuevo formato inquisitorial. En fin, los términos de poder afectan a la nitidez de las inteligencias.
Y ahora el recurso de casación. Es la esperanza política de ganar la batalla. El Supremo puede admitir o rechazar el recurso contra la sentencia absolutoria. Pero la cuestión es: ¿puede variar el fallo? Muy difícil. Jurídicamente no existe razonamiento alguno en la sentencia absolutoria dado que el veredicto es de inocencia o no culpabilidad, que es más preciso en terminología legal. ¿Puede entrar a los hechos y valorar la prueba? Pues no, porque en casación eso no es posible. ¿Entonces? Pues solo si el razonamiento del jurado fuera deficiente, irracional, no valorara las pruebas más que de una manera rotundamente absurda… Para eso se necesitaría una evidencia muy clara y unas preguntas formuladas a los miembros del jurado que resultaran algo complejas. Pero es que aquí se preguntó si había recibido unos trajes de regalo. Nada complejo. Muy concreto. No veo fácil revocación de la sentencia, aunque experiencia tengo de que todo es posible.

Bueno, pues el juicio a Camps, a pesar de ganarlo no se traducirá en un retorno al poder. Cierto es que su renuncia fue condicionada al juicio y que una vez ganado podría argumentar con lógica y recuperar su posición. Con lógica formal sí, pero con lógica política y social no. Las consecuencias del juicio y las cintas escuchadas se proyectan más allá de la inocencia jurídica. Camps no volverá a ser Presidente de la Generalitat. Al menos por el momento, claro, porque quien se atreva a predecir algo en política es que carece de experiencia visual de la historia